Ingredientes
- 500 g. de cerezas
Para la Base
- 200 g. de galletas tostadas (yo utilizo chiquilín)
- 80 g. de mantequilla
- 50 ml. de kirsch
Para la Crema
- 500 g. de queso fresco
- 500 g. de yogur de maracuyá
- 80 g. de azúcar glass
- 2 cuchas pequeñas de zumo de limón
- 50 ml. de kirsch
- 9 hojas de gelatina
- virutas de chocolate
Preparación
- Lavar y deshuesar las cerezas, dejando algunas enteras para la decoración. Reservar.
- Forrar un molde desmontable con papel vegetal.
- Moler las galletas, y añadir la mantequilla fundida en el microondas, junto con el kirsch. Mezclar hasta obtener una especie de pasta y extender sobre el fondo del molde.
- Poner la gelatina en abundante agua fría y dejar unos minutos, hasta que se hidrate.
- Echar en la thermomix o cualquier otro robot de cocina los ingredientes restantes y batir hasta obtener una crema suave.
- Meter la gelatina en el microondas con un poquito de agua y calentar hasta que se disuelva.
- Añadir la gelatina al preparado de la crema y batir de nuevo unos segundos, hasta que se haya mezclado perfectamente.
- Verter la mezcla en el molde, sobre la base de galletas y añadir las cerezas que teníamos reservadas.
- Meter la tarta en el frigorífico un mínimo de 2 horas (mejor de un día para otro).
- Desmoldar con cuidado. Colocar sobre el plato de presentación y adornar con las cerezas restantes y virutas de chocolate.
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